Efectos psicológicos y conductuales del alzhéimer (noticia)

Efectos psicológicos y conductuales del alzhéimer

La enfermedad de Alzheimer constituye el mayor desafío de la medicina actual: cada hora se diagnostican 50 nuevos casos en Europa. En España afecta a más de 1.100.000 enfermos, circunstancia que repercute en la vida de 4.500.000 personas. Su frecuencia aumenta a partir de los 65 años: un 10 por ciento de las personas mayores de esa edad sufren alzhéimer. De acuerdo con los datos de la Federación Internacional de Asociaciones de Alzheimer, se estima que en la actualidad viven 46 millones de personas en todo el mundo con dicha demencia, y se calcula que esa cifra se triplicará en el año 2050 como consecuencia del aumento de la esperanza de vida de la población y si no se encuentra una cura efectiva. También su coste económico supone en la actualidad un gran problema de salud pública: se calcula que en España la enfermedad cuesta por paciente y año más de 30.000 euros. Asimismo, se considera que la familia asume el 87 por ciento del gasto de los cuidados.

La pérdida de la memoria suele ser la primera queja que manifiesta el paciente o perciben sus familiares, aunque otras funciones cognitivas, como la atención y la concentración, el lenguaje, la orientación en tiempo y espacio, la percepción, la resolución de operaciones matemáticas, las habilidades motoras intencionadas o la elaboración de pensamientos complejos, también se verán afectadas a medida que avance la enfermedad.

El deterioro de las facultades cognitivas reduce lentamente la capacidad del enfermo para llevar a cabo las actividades del día a día que le permiten vivir de una manera autónoma e integrado en su ambiente. Al principio experimenta problemas para ejecutar las tareas más complejas: trabajar, viajar, interaccionar socialmente o disfrutar de sus aficiones, entre otras. Más adelante se suman a ello las dificultades relacionadas con actividades que permiten a la persona ser independiente: viajar en transporte público, hacer la compra, cocinar, gestionar la contabilidad del hogar, etcétera. En las fases más avanzadas, al paciente le resulta más difícil mantener los niveles básicos de autonomía personal, puesto que se vuelve más dependiente para ejecutar acciones cotidianas, entre ellas, comer, vestirse, ir al servicio, asearse o controlar los esfínteres.

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Los mensajes internos positivos pueden mejorar el propio rendimiento ( noticia)

Decirse a uno mismo que se es capaz de superar los propios resultados puede ayudar a incrementar el desempeño ( Investigación y Ciencia)

Andrew Lane, de la Universidad de Wolverhampton, y otros investigadores analizaron a través del laboratorio de la BBC, canal en línea que facilita la participación de los ciudadanos en experimentos, tres estrategias de automotivación:

-el diálogo interno, 

-la visualización mental y 

-la planificación ante una determinada situación. 

Aplicaron cada una de estas habilidades psicológicas a una de las cuatro fases que forman parte de una actividad competitiva: proceso, resultados, control de activación e instrucción. Según observaron, los individuos que se decían a sí mismos «Puedo hacerlo mejor la próxima vez» obtenían mejores resultados que el grupo control.

Superarse a sí mismo

En concreto, las mejoras más importantes se observaron cuando los sujetos usaban el diálogo interno en relación con los resultados («Puedo superar mi mejor puntuación») y con el proceso («Puedo reaccionar más rápido»). La estrategia de visualización mental también se mostró útil en relación con la fase de resultados (los sujetos debían imaginarse que jugaban mejor y que superaban su propio puntuación) y con la de proceso (debían imaginarse que jugaban y que eran más rápidos que en la anterior partida). En cambio, se halló que la estrategia de motivación a través de la planificación era una de las menos exitosas, aunque se sabe que resulta una herramienta eficaz para el control del peso y otros cambios en el estilo de vida.

Los autores concluyen que las intervenciones en línea pueden contribur a la enseñanza de habilidades psicológicas para automotivarse. También sugieren que estas se centren en el aumento de la motivación, el esfuerzo y las emociones positivas.

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Record de ventas en coches diesel ( noticia)

En la primera mitad de 2016 , se vendieron en Alemania 812.000 turismos diesel :."Nunca antes se vendieron más coches diesel  en los primeros seis meses del año en Alemania ", dijo Matthias Wissmann, presidente de la Asociación de la Industria del Automóvil (VDA) en la presentación del informe provisional.

GRAFICO DE VENTAS

Si haces ejercicio cuatro horas después de estudiar, memorizarás mejor ( noticia)

Si haces ejercicio cuatro horas después de estudiar, memorizarás mejor

La práctica del deporte puede mejorar la consolidación de la memoria, pero solo si se realiza en un intervalo de tiempo específico, y no justo después del aprendizaje.

Desde hace tiempo sabemos que el ejercicio físico beneficia nuestro cerebro. No obstante, todavía desconocemos muchos detalles sobre cómo podemos optimizar sus efectos positivos en los procesos de aprendizaje. Según un nuevo estudio, publicado esta semana en la revista Current Biology, para favorecer la consolidación de la memoria la mejor opción es ir al gimnasio cuatro horas después de haber estudiado, y no inmediatamente después del aprendizaje.

«Los resultados demuestran que podemos mejorar la consolidación de la memoria por la práctica de deportes después del aprendizaje», explica Guillén Fernández,  investigador de la Universidad Radboud  (Países Bajos), y autor principal del trabajo.

El estudio, en el cual participaron 72 voluntarios, evaluó los efectos que tiene en la consolidación de la memoria y la memoria a largo plazo una sola sesión de ejercicio físico después de estudiar durante 40 minutos. De manera aleatoria se repartió a los participantes en tres grupos: uno hizo ejercicio de inmediato, el segundo cuatro horas más tarde, y el tercero no llevó a cabo ningún tipo de deporte. La práctica de deporte consistió en 35 minutos de entrenamiento en bicicleta a una intensidad de hasta el 80% de la frecuencia cardíaca máxima de los participantes.

Los resultados son interesantes. Aquellos que realizaron ejercicio cuatro horas después de su sesión de aprendizaje conservaron mejor la información al cabo de dos días en comparación con los que hacían ejercicio inmediatamente o los que permanecían sedentarios. Esta conclusión se pudo observar también en los sujetos a través de las imágenes cerebrales del hipocampo, área clave en el proceso de memorización y aprendizaje.

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