Paralelismos entre las crisis de 1929 y
2007 ( 9 min.)
por
Juan B Lorenzo d Membiela
Doctor por la Universidad de Valencia
En “La decadencia de Occidente” , Spengler
explica el carácter cíclico de las civilizaciones y su destrucción como fase última. Este inevitable final
genera, en la tragedia de las circunstancias, una resignación incondicional.
Resignación que a muchos sirvió para
soportad fatalidades. ¿ Hoy también ante lo incierto del día a dia y con miedo a alzar la mirada para escudriñar hasta
el fututo más inmediato? Nada puede objetarse a los gobernantes de hoy porque nada se objetó a los gobernantes
de ayer. Solamente que el ayer y el hoy han difuminado el mañana.
La crisis de 1929 ha sido estudiada como manifestación de una economía cíclica en tanto la concurrencia de comportamientos
financieros y económicos muy parecidos .
Especialmente el agotamiento de las oportunidades de inversión debido a una sobreexpansión de la demanda consumista y
la inversión , el llamado overshooting (Kindleberguer,2009:308).
Sus efectos durante los años sucesivos nos muestran aspectos que concurren en la actualidad aunque
no todos. En lo esencial, subsisten emociones que son permanentes, sea cual sea el momento
histórico, porque pertenecen a la naturaleza del hombre que se mantiene inalterable. Y a ellas debe acudirse para explicar
comportamientos que pueden parecer
erráticos.
El ciclo que se repite está compuesto por la crisis de liquidez, por presupuestos
públicos extravagantes, por disminuciones de precios que quiebran el sistema monetario , por una inversión bruta cercana a cero y, finalmente, por una apocalipsis
bancaria (Rostow, 1971:84).
Conocer
circunstancias de 1929 y años subsiguientes
pueden ayudarnos a evitar caer más profundamente porque saber
nadar en las “formas” de la comunicación
impide que los “fondos” se sumerjan más en el abismo. Lo emotivo económico ha operado en sentido positivo y negativo. Destacable
como ejemplos:
a)El
miedo de los inversores a percepciones o
noticias negativas sobre la solvencia económica de un país . No se
trata de su autenticidad, tan sólo
la constancia de un rumor equívoco , fútil.
Se generó pánico y ansiedad de liquidez que motivó la venta de valores y divisas.
Ello
ocurrió tras unas declaraciones de
Hoover en Des Moines (Iowa, EEUU)
en 4 de octubre de
1932 , cuando mencionó “lo
cerca que EEUU había estado de abandonar
el patrón oro (…) “. Este comentario desató una
oleada mundial de especulación
financiera en contra del dólar.
Otro
ejemplo, la cancelación de depósitos en
Nueva York en 1929 por inversores extranjeros,
bancos y corporaciones
estadounidenses foráneos sin
motivo alguno. Ello generó perdidas a inversores particulares. Éstos, a
su vez, para resarcir sus perjuicios, realizaron sus
hipotecas, provocando , en la mayoría de los casos, desahucios masivos .
El precio de la
vivienda cayó rápidamente junto a materias primas y automóviles . En agosto
de 1929 se contrajo la venta de vehículos, de 440.000 a 319.000 en octubre; a
169.500 en noviembre y a 92.500 en diciembre( Butler,1969).
b)Recuperación de la confianza. Gran Bretaña
recuperó la confianza de los mercados internacionales en la libra en enero de 1932.
El gobierno británico anunció que el Banco de Inglaterra cumpliría los pagos de los créditos en el verano de 1931 sin mermar su stock de oro.
También informó el pago adelantado y voluntario del impuesto de la renta en
enero cuando debía hacerse en marzo (véase
el estudio de Einzing, P., “The
Comedy of the Pound” ,1933, p.
56).
La finalidad perseguida fue estabilizar la libra al valor oro pero
también restablecer a Londres como
centro financiero mundial (Einzing, 1935), cosa que hoy, en el siglo XXI, se
pretende en detrimento de Alemania .
La sutilidad financiera no casa con la realidad
abrupta de unos hechos. Y de ello cabe deducir
que el mercado financiero es sensible a la simple sospecha, sin más. Las
“políticas” de
marketing sobre los ajustes
financieros hechas por dirigentes han podido ofrecer una imagen de solidez económica que a la postre ha dado resultados positivos,
al menos en el corto plazo. Es vivir en la mentira, en lo virtual, pero al fin y al cabo vivir aunque sea muriendo.
Reclamo la atención sobre un hecho
desapercibido, que no ha merecido comentario alguno. En 2001 se publicó
una ley orgánica de estabilidad presupuestaria para todas las administraciones
. Esta norma permitía a las comunidades autónomas adoptar las medidas necesarias para alcanzar el déficit cero
, sea con una política de incremento de los ingresos públicos, sea a través de
reducción de los gastos, y sin que pueda recurrirse a una mayor emisión
de deuda pública como forma de financiación.
El propósito de la misma se vio truncado en
2006 al modificarse de forma sustancial la ley de 2001 y participar todos de un
nuevo marco normativo que invitaba a caminar de cualquier modo en plena burbuja inmobiliaria que enriquecía
a las administraciones vía impuestos.
Hoy la
arquitectura del tiempo invita
a reflexionar sobre la decadencia plasmada por Góngora en sus “ Soledades
“. Asfixias implacables
de una economía cuya estructura
interna es incomprendida. Desnaturalización del contexto humano. Transito de la
ética de lo difuso hacia un narcisismo evocador de lo bucólico vivido. De lo
nacional al imperio y del imperio a la aldea como catalizador de la ruindad de
los hombres y la decadencia del abandono y la soledad . Son sus versos:
Aquellas que los árboles apenas
Dejan de ser torres hoy(...)
Las estrellas nocturnas luminarias
Eran de sus almenas(...).
Yacen ahora, y sus desnudas piedras
Visten piadosas yedras:
Que a ruinas y a estragos
Sabe el tiempo hacer verdes halagos(...).