Un homenaje debido a las gentes de la Armada de 1588
El acto, que se celebra hoy , día 31 de mayo y mañana 1 de junio, en Yecla, es un gesto único en nuestro país. Y es un gesto largamente esperado. España por fin supera los viejos complejos que siempre la han sujetado y la han hecho callar por miedo al prejuicio ajeno.
Se ha escrito mucho sobre esta flota, asediada por inclemencias climáticas desde que partió de Lisboa. A esto se une los larguísimos debates sobre el infortunio que supuso la muerte del marqués de Santa Cruz, la idoneidad del duque de Medina Sidonia, la diligencia del duque de Parma ,e incluso la actitud del rey Felipe II, antes y durante la singladura.
Brulotes ingleses ardiendo en Gravelinas.
Fuente: Wikicommos
Además de las críticas sobre la derrota, el adversario se erigió en ganador sobre la Armada Española, no sé muy bien en mérito a qué, pues después de Gravelinas, la flota española se encontraba prácticamente integra, con más de 100 navíos. Después de Gravelinas , todavía era una maquinaria letal de guerra .
Otra cosa son las inclemencias del tiempo, la matanza indiscriminada de españoles que alcanzaban las costas inglesas e irlandesas no católicas a nado y exhaustos. Arrebatos homicidas que solo delataban el espanto inglés al ver a aquellos hombres que se enfrentaron a la flota inglesa y holandesa en las aguas del canal de la Mancha.
Todavía en el imaginario británico la formación de media luna de la armada causa pavor después de tantos siglos e integra el sustrato sociológico de la nación británica.
Juan Lorenzo d Membiela