Salmón modificado genéticamente para consumo humano: ecologismo artificial ¿incuestionablemente medioambiental?
-Alcanza la longitud del salmón natural en la mitad de tiempo.
-Producto genéticamente modificado entre anguila marina y salmón Chinook del Pacífico.
Boquete, en la provincia de Chiriquí, a unos 1.200 metros sobre el nivel del mar, parece un escenario insólito para albergar el polémico proyecto con el que la compañía estadounidense Aquabounty Technologies viene experimentando desde hace casi dos décadas.
De cumplir los requisitos de la Agencia de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos, (FDA por sus siglas en inglés) los salmones que crecen en sus tanques panameños podrían pasar a la historia como los primeros animales genéticamente modificados aprobados y comercializados para consumo humano.
Los peces, denominados AquAdvantage Salmon, son salmones del Atlántico modificados para crecer más rápido y alcanzar un tamaño mayor que sus pares silvestres, de ahí el apodo de "super salmones".
Eso, gracias a los genes "prestados" del salmón Chinook del Pacífico y de la anguila marina.
Tras 17 años de investigaciones, los científicos de la empresa Aquabounty lograron que los especímenes alcanzaran el tamaño de mercado en apenas 18 meses, casi la mitad de tiempo que le toma a sus homólogos no modificados.
Y desde hace esos mismos años, paralelamente a la investigación científica Aquabounty busca la aprobación de la FDA, algo que parece estar cada vez más cerca.
noviembre 2015.
Aprobado por la Administración de Medicinas y Alimentos de EEUU
Los reguladores estadounidenses aprobaron este jueves por primera vez un salmón genéticamente modificado para el consumo humano.
La decisión del gobierno de Barack Obama tardó más de cinco años ante los temores de los consumidores sobre los alimentos modificados genéticamente. Pero la Administración de Medicinas y Alimentos (FDA por su sigla en inglés) dijo que ese pescado puede ser consumido sin peligro.
“La FDA ha analizado y evaluado minuciosamente los datos y la información entregados por AquaBounty Technologies en relación con el salmón AquAdvantage, y determinó que han satisfecho los requisitos reglamentarios para su aprobación, incluyendo que los alimentos derivados de este pescado son seguro para su consumo”, afirmó la doctora Bernadette Dunham, directora del centro de medicina veterinaria de la FDA.
Los críticos temen que ese salmón, que alcanza el tamaño comercial más rápido que el animal de granja no diseñado genéticamente, cause alergias a los humanos y diezme la población natural de salmones si se escapa y se reproduce. Otros dicen que modificar animales genéticamente es un problema ético.
Sin embargo, "la FDA determinó que los alimentos derivados del salmón AquAdvantage sontan seguros para su consumo y tan nutritivos como los derivados de otros salmones del Atlántico no diseñados genéticamente, y que no existen diferencias biológicamente importantes en el contenido nutricional del salmón AquAdvantage en comparación con el de otros salmones del Atlántico de granja", detalló la agencia en un comunicado.
Este salmón tiene añadida una hormona de crecimiento del salmón Chinook del Pacífico que le permite producir la hormona de crecimiento todo el año. Los ingenieros lograron mantener la hormona activa añadiendo el gen del pez zoarces americanus que es similar a las anguilas. Ese gen se comporta como "interruptor de encendido" para la hormona.
El salmón del Atlántico común produce la hormona solo una parte del año.
La FDA dijo, además, que es improbable que el salmón modificado cause daños en el océano. El pez sería hembra y estéril, aunque un mínimo porcentaje pudiera quizás reproducirse. La compañía ha dicho que el potencial de escape es muy pequeño.