España en la Oceanía
o la escisión de la conciencia patria [( micro ensayo) ( 3 min.)]
Por
Juan B. Lorenzo de Membiela
Se desconoce que hubo un tiempo en que
España tenía posesiones en Oceanía. Yo creo que
aún cuando las gobernaba, la distancia, viajes exasperante de 4 meses (Cádiz-Manila),
la expansión imperial del presidente norteamericano Mckindley, la política y los políticos, y los ,por
entonces, estertores del Imperio,
hicieron que la metrópoli geográfica desapareciera
.
La frustración de no poseer lo que de cientos
de años se tenía convirtió a una triste España cosmopolita en una España de barrio hacinada en sus frustraciones, comadreos, ambiciones y
soberbias.
Se perdieron las llamadas «Islas Orientales Españolas» que comprendían las Filipinas con sus 7.107 islas ;
las Islas Marianas , archipiélago
de 19 islas, entre ellas, la Isla de Guam
( Guajan en español) en el extremo sur
de Marianas , de 544 Km. cuadrados, muy
cerca de Papúa Nueva Guinea. Las Islas
Carolinas, formadas por casi 1000 islas
y con una extensión de 1.194 km. cuadrados
y Palaos con 340 islas de origen volcánico a 890 Km. al oriente de las
Filipinas. También la Isla de Wake.
Contrastando superficies de los
territorios de España resulta que en África se poseían 2.204 Km. cuadrados; en América 128.147 Km. cuadrados y en Oceanía 348.985 Km. cuadrados (Semper, 1869). No eran las Filipinas y todas
las islas colonias improductivas. Superaban a Cuba en todo menos en civilización.
Resulta curioso que poseyendo tal extensión
las atenciones eran insuficientes, como insuficientes el número de
españoles que quisieran ir a aquellas o tomar destino administrativo o militar en
las mismas. ¡Siempre la comodidad !
Cientos de islas en la « Oceanía española » estaban desiertas y sólo en unas cuantas se
concentraron los españoles. Ello puede entenderse por la existencia de tribus
beligerantes, enfermedades tropicales, insectos y flora venenosa y sultanes locales. De ellos dependían los conocidos «
juramentados »: sin distinción de sexo y edad. Penetraban en
poblados o ciudades españolas o
indígenas amigos, con el puñal de hoja
ondulada asesinando a quien se encontraran hasta que fueran abatidos.
No era una tierra acogedora y
pacífica, aunque las ciudades abrazaron
la fe católica de forma natural y sincera.
Hoy, las Filipinas es el país con mayor número de católicos en Oceanía. Todavía se
sigue hablando el español no de forma oficial , sino privadamente , en los hogares y no en muchos. La persistencia norteamericana de borrar todo lo hispánico fue contumaz.
Solía ser frecuente que los mayores enseñaran a sus hijos algo de castellano. No hay que olvidar que nuestro idioma fue adoptado por las aristocracias indígenas hace siglos conservándolo hasta hace pocos años como símbolo de distinción.
En algunas zonas de las Islas Marianas el inglés es rechazado (aunque aprendido en cuanto lengua oficial) por ser considerado como un idioma colonizador (Molina Martos, 2006). Es el testimonio de un pueblo que lucha por su identidad.
Solía ser frecuente que los mayores enseñaran a sus hijos algo de castellano. No hay que olvidar que nuestro idioma fue adoptado por las aristocracias indígenas hace siglos conservándolo hasta hace pocos años como símbolo de distinción.
En algunas zonas de las Islas Marianas el inglés es rechazado (aunque aprendido en cuanto lengua oficial) por ser considerado como un idioma colonizador (Molina Martos, 2006). Es el testimonio de un pueblo que lucha por su identidad.
Magallanes, por encargo del emperador
Carlos I, zarpó de Sevilla el 19 de
agosto de 1519 con cinco buques .
Tras numerosos incidentes desembarcó en Cebú el 27 abril de 1521, hallando la muerte por un dardo emponzoñado que le atravesó el pecho el 26 de agosto de 1521. Se encontraba en la isla de Magtan intentando pacificar tribus en guerra.
Fue sustituido en el mando por el capitán Eduardo Balboa que no gustó al rey de Cebú, siendo asesinado y envenenando a 35 hombres en una comida ofrecida en honor a los españoles. Lograron hacerse a la mar dos buques siguiendo travesías distintas.
Uno, « El Trinidad », optó por llegar a España por el Pacífico por miedo a doblar el cabo de Buena Esperanza pero al poco de partir cayó en manos de piratas moluqueses que asesinaron a toda la tripulación.
El otro buque, llamado «Victoria», dobló el cabo arribando a España a principios de 1522.
Tras numerosos incidentes desembarcó en Cebú el 27 abril de 1521, hallando la muerte por un dardo emponzoñado que le atravesó el pecho el 26 de agosto de 1521. Se encontraba en la isla de Magtan intentando pacificar tribus en guerra.
Fue sustituido en el mando por el capitán Eduardo Balboa que no gustó al rey de Cebú, siendo asesinado y envenenando a 35 hombres en una comida ofrecida en honor a los españoles. Lograron hacerse a la mar dos buques siguiendo travesías distintas.
Uno, « El Trinidad », optó por llegar a España por el Pacífico por miedo a doblar el cabo de Buena Esperanza pero al poco de partir cayó en manos de piratas moluqueses que asesinaron a toda la tripulación.
El otro buque, llamado «Victoria», dobló el cabo arribando a España a principios de 1522.
Tras otras expediciones, la de 1542
capitaneada por Ruiz López de Villalobos
bautizó al archipiélago como Filipinas en honor
de Felipe II, por ese tiempo todavía Príncipe de Asturias. Fue en la isla de Gilolo.
Tampoco fructificó el asentamiento siendo expulsados por los
portugueses. El capitán falleció extenuado en Amboina , la tripulación logró arribar a España en 1549.
Legazpi, escribano (notario) del
virreinato de Nueva España (Méjico), vendió todas sus propiedades empleándolas para
alcanzar una ambicionada empresa, alcanzar las llamadas « Islas de Poniente ».
Los horribles rumores que
se conocían evitaban cualquier intento. Pero frente a la adversidad que disuade
siempre, la tenaz voluntad de Legazpi,
su extrema resolución de lanzarse
a un todo o a una nada sin temor a la muerte y el asesoramiento del agustino recoleto P.Urdaneta
lograron sortear todos los obstáculos. Principalmente el de los
portugueses que, por delante de la expedición española, intrigaban entre las tribus de
las Molucas y resto de islas.
Recelosos los indios de Cebú tendieron una trampa mortífera a los españoles. Descubierta, fue ajusticiada
con tanta benevolencia que los indígenas
bajaron de las montañas convirtiéndose al catolicismo y comenzando una fructífera y enriquecedora convivencia.
Se tomo posesión, por fin, en 1565.
No se habló nunca de exclusión, no se habló de reservas para los indígenas.
La religión impregnó de dignidad a cada ser humano y fue tan grande el calado católico que aún hoy se mantiene la Pontificia y Real Universidad de Santo Tomás, en Manila, regentada desde su fundación por agustinos recoletos.
En 2011 cumplió 400 años. Es con ello la primera universidad de Asia y una de las más antiguas del mundo.
No se habló nunca de exclusión, no se habló de reservas para los indígenas.
La religión impregnó de dignidad a cada ser humano y fue tan grande el calado católico que aún hoy se mantiene la Pontificia y Real Universidad de Santo Tomás, en Manila, regentada desde su fundación por agustinos recoletos.
En 2011 cumplió 400 años. Es con ello la primera universidad de Asia y una de las más antiguas del mundo.
La historia del descubrimiento, más
que de conquista de las Filipinas, es tan grande en anécdotas y hechos extraordinarios que es imposible
reflejarlo en breves escritos.
Debo a las Islas el hecho de que mis bisabuelos se casaran en Vigán (Isla de Luzón) , que todavía alberga el legado español, con sus casas de piedra y calles adoquinadas. Ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999.
Aunque lejanas en la distancia, todavía se conservan cercanos lazos emocionales .
Debo a las Islas el hecho de que mis bisabuelos se casaran en Vigán (Isla de Luzón) , que todavía alberga el legado español, con sus casas de piedra y calles adoquinadas. Ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999.
Aunque lejanas en la distancia, todavía se conservan cercanos lazos emocionales .