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lunes, 20 de noviembre de 2017

Ciencia y tecnología: Centralidad de la persona humana (Vaticano)

Ciencia y tecnología: Centralidad de la persona humana (Vaticano)


«[…]No todo lo que es técnicamente posible o factible es, por lo tanto, éticamente aceptable “sigue siendo válido”, indicó el Santo Padre […]» .

Discurso del Papa al Consejo Pontificio de Cultura 

La ciencia y la tecnología nos han ayudado a profundizar los límites del conocimiento de la naturaleza y, en particular, del ser humano. Pero una y otra no bastan, por sí solas, para dar todas las respuestas”, dijo el Papa Francisco.
El Papa Francisco recibió en audiencia el pasado sábado, 18 de noviembre de 2017, a los participantes en la asamblea plenaria del Consejo Pontificio de la Cultura, dedicada al tema “El futuro de la humanidad: nuevos retos a la antropología” (Vaticano, 15 – 18 de noviembre).
En su discurso, el Papa habló de la necesidad de “recurrir a los tesoros de la sabiduría que se conservan en las tradiciones religiosas, en la sabiduría popular, en la literatura y las artes”, que llegan profundamente al misterio de la existencia humana, sin olvidar, sino al contrario, “redescubriendo, las contenidas en la filosofía y en la teología”.

Fuente: Pixabay. Licencia CC0

“Debemos expresar nuestra gratitud a los hombres y mujeres de ciencia por sus esfuerzos y su compromiso en favor de la humanidad”, señaló el Papa. “Este aprecio por la ciencia, que no siempre hemos sabido  manifestar” –añadió el Santo Padre– encuentra su fundamento último en el plan de Dios que “nos ha elegido antes de la creación del mundo […] nos ha destinado a ser hijos suyos” (Ef 1,3-5) y que nos confió el cuidado de la creación: “cultivar y cuidar” la tierra (ver Gen 2.15).
El Papa aportó que la Iglesia ofrece algunos grandes principios para sostener este diálogo. El primero es la centralidad de la persona humana que hay que considerar como un fin y no como un medio; el segundo principio a recordar es el del destino universal de los bienes, que también atañe al  conocimiento y a la tecnología; y finalmente, el principio de que no todo lo que es técnicamente posible o factible es, por lo tanto, éticamente aceptable “sigue siendo válido”, indicó el Santo Padre[…] .

Fuente: Zenit