Buscar este blog

viernes, 14 de julio de 2017

Schumpeter y el empresario innovador (micro-ensayo)


Schumpeter y el empresario innovador (micro-ensayo)

Es J.A. Schumpeter, en su libro «Theorie der wirtschftlich entwicklung» (Teoría del desarrollo económico) [1]  de 1911, quien define la función del empresario con   innovar, identificar y fabricar nuevas posibilidades o combinaciones en la actividad económica. Comprendería cualquier actuación no hecha hasta entonces, entre ellas[2]:

1. La localización de una nueva fuente de aprovisionamiento de materias primas. 

2. Las mejoras incorporadas a los procesos de producción.
 

3. La introducción de un nuevo bien en el mercado.
 

4. La apertura a nuevos mercados.
 

5. La introducción de modificaciones en la organización de los negocios, dando lugar a nuevas formas organizativas.

La teoría del empresario innovador se integra en la teoría económica. Relaciona su actividad y su ganancia con el desequilibrio en la economía. Su aportación decisiva fue conectar esos desequilibrios con su acción que genera desarrollo económico[3].

El empresario innova pero no asume el riesgo. Este es soportado por quien aporta el capital.

Integra como empresario no solamente a los hombres de negocios independientes sino a todos quienes realicen de hecho cualquier función empresarial, tanto si son dependientes o empleados de una compañía, sean directores, miembros del consejo de administración o accionistas mayoritarios.

Excluye de la definición a los gerentes y consejeros industriales que se limitan a explotar negocios establecidos.

La función de dirección cuando las circunstancias son normales no pasa de ser un ejercicio mecánico sin mayor aportación. Lo que define la excepcionalidad del empresario son las acciones que acomete fuera de las rutinas.

Esa actividad contiene la función del liderazgo. Fuera de los cauces ordinarios, en donde no se dispone de información para decidir, el éxito depende de la intuición y en ella radica el liderazgo del empresario.

Fundamenta la Teoría del empresario innovador. El empresario como innovador o agente principal del desarrollo económico capitalista consecuencia del cambio tecnológico. Liderazgo innovador que justifica su beneficio como renta residual de la economía.

Para Von Mises, el ejercicio de la « empresarialidad » implica la «especial perspicacia » a la que Kirzner refiere con «estar alerta » haciendo posible al hombre descubrir y darse cuenta de lo que ocurre a su alrededor[4]. Es lo que denomina Mises «mirar al futuro con ojos de historiador».

La empresarialidad de Mises es una actividad equilibradora de los precios, de unas mismas mercancías, que satisface los deseos de los consumidores para alcanzar beneficio.

Diferencia entre una actividad empresarial y otra actividad gestora. Esta se haya subordinada a la primera.

Distingue al director del empresario en tanto que el primero nunca llega a ser responsable patrimonial de las pérdidas. Este criterio diferencia a Mises de Knight para quien no existía diferencia entre el director asalariado y el empresario que dirige su negocio.

El estado de alerta del empresario, propio de la acción humana en la tesis de Mises, es un talento para descubrir y apreciar oportunidades para obtener beneficio.



[1] Schumpeter, J.(1911): «Theorie der wirtschftlich entwicklung (trad.: The Theory of Economic Development: An inquiry into profits, capital, credit, interest and the business cycle)», Leipzig: Duncker & Humblot.

[2] Claver Cortés, E., Llois Taverner, J., Lloret Llenares, M y Molina Manchón, H.(1998): «Manual de Administración de empresas», cit., p. 64.

[3] Isabel Dopacio, C. y otros (2004): «Fundamentos y Aplicación de la Economía de Empresa», Madrid: Paraninfo, p. 249.

[4] Von Mises, L. (1968): «La acción humana. Tratado de Economía », Madrid: Sopec, pp. 56 y ss..