Buscar este blog

domingo, 22 de marzo de 2020

Innovaciones enfrentadas: Covid19 vs humano (micro ensayo)


Innovaciones enfrentadas: Covid19 vs humano (micro ensayo)

Juan B. Lorenzo de Membiela

Es la hora de  innovar. A los muchos españoles que tienen esta cualidad las circunstancias reclaman  sus invenciones.

En Italia, según una destacada publicación en la red ,  se utilizan impresoras 3D para confeccionar desde máscaras, hasta valvulas Open source para respiradores.
Fuente: Pixabay. Licencia CC0

Los promotores  se pusieron en contacto con el diario Giornale di Brescia, cuya editora, Nunzia Vallini, se comunicó inmediatamente con el físico Massimo Temporelli, un referente maker en Italia fundador de FabLab, que había colaborado con ellos en temas de tecnología.

No debe olvidarse que el coronavirus tambien innova, las mutaciones que opera en su ARN  tienen como fin optimizar su propia pervivencia frente a entornos hostiles.
 La lucha se desplaza al terreno de la innovacion. El hombre innova a través de la medicina pero tambien en otros muchos  campos porque a diferencia del microbio el ser humano es más complejo. Esa complejidad encierra tambien un lastre:  una respuesta más lenta en su capacidad táctica de defensa.

La creatividad es un talento, quienes lo poseen pueden o no crear, pero los que carecen de él aplican formalidad y rigidez para paliar su falta. Esta premisa sintetiza las dos actitudes que cabe adoptar ante la crisis: la conservadora, de suprimir partidas presupuestarias para evitar endeudamiento y la creativa, de buscar otras alternativas a las existentes que generen soluciones antes inauditas. 
Etimológicamente creatividad procede del latín «creatio», entendiéndola como la capacidad de pensar más allá de las ideas admitidas, combinando, de forma original y nueva, conocimientos ya adquiridos (Kraft, 2005: 42)[1]. A ella se debe nuestra evolución como especie y el grado de desarrollo científico y económico social. 
Concurren varias definiciones y de todos ellas cabe percibir una característica, una nota, que modela su significado, su contenido, su operatividad. Es útil porque de ellas extraemos premisas para promover creatividad en la empresa y en todas las organizaciones en general. 
Para Barron (1955) y Edward de Bono (1974)[2]: «es una aptitud mental y una técnica del pensamiento». Para MacKinon (1960): «La creatividad responde a la capacidad de actualización de las potencialidades creadoras del individuo a través de patrones únicos y originales». 
Para Mednick (1964): «El pensamiento creativo consiste en la formación de nuevas combinaciones de elementos asociativos. Cuanto más remotas son dichas combinaciones más creativo es el proceso o la solución»[3]. 

Parnes (1962) declara que: «es la capacidad para encontrar relaciones entre ideas antes no relacionadas, y que se manifiestan en forma de nuevos esquemas, experiencias o productos nuevos». Amabile (1983) supedita la creatividad a tres premisas[4]:

 a) Destrezas en la disciplina en donde se interviene.

b)  Destrezas para la creatividad.

c)  Motivación en la tarea que se asume, tenacidad y capacidad para reducir las presiones extrínsecas que impiden el hecho creativo. 

Howard Gadner, explicita que la creatividad surge de la interacción de tres nodos[5]

a) El individuo con su propio perfil de capacidades y valores.

b)  Los ámbitos para estudiar y dominar algo que existen en una cultura.

c)  Los juicios emitidos por el campo que se considera competente en una cultura. En la medida en que el campo acepte las innovaciones, una persona o su obra puede ser considerara creativa; pero si las innovaciones se rechazan, malinterpretan o juzgan poco novedosas, resulta inútil seguir sosteniendo que un producto sea creativo. 

La creatividad para Gardner, no debe ceñirse solamente al cerebro, a la mente o a la personalidad de un individuo (2001:8)[6]. Para Kraft, participan otros factores concluyentes[7]

a) Curiosidad.

b)  Capacidad de asombro.

c)  Ilusión.

d)  Voluntad de derribar barreras mentales.

e)  Confianza en las propias capacidades (2005, 11:43).

También es básico y aún por ello no citado, no temer al fracaso y al ridículo. Muchos científicos han publicado junto a obras excelentes otras de calidad ínfima. 
Bonnardel, Libart y Marmèrche, de la Universidad de Provence-Aux-Marsella, detectaron la capacidad de crear analogías entre los objetos vistos por creativos y los proyectados después. 
También se ponderó la forma en que son tomadas en cuenta las restricciones. Se vislumbra una combinación entre la capacidad para crear analogías sopesando las limitaciones del proyecto: no basta crear algo sino que ese algo sirva a un propósito (2006, 18:47-8)[8][9]. 
Para Koontz, Weinhrich y Cannice, crear es la habilidad y el poder de desarrollar nuevas ideas. La innovación supone emplear y usar esas ideas. Está distinción es forzosa a efectos de precisión terminológica. 
En el proceso creativo interactúan 4 factores (2012: 164-5)[10]:

1.                   - Escaneo inconsciente: se encuentra más allá del estado consciente y requiere la absorción del problema. 

2.              -Intuición: Conecta al consciente con el inconsciente, suelen formularse estrategias que aparentemente sean contradictorias. 

3.                  -Percepción: Suele ser el resultado de un laborioso trabajo pero otras veces no. La percepción puede aparecer cuando el pensamiento no está directamente enfocado en el problema que nos ocupa. 

4.                 -Formulación lógica: Consiste en la experimentación de la percepción mediante la lógica o el experimento. 

La neurología está interesada por esta cuestión dada la importancia de la innovación tecnológica y de procesos en una economía globalizada y competitiva
Cuando una mano de obra barata en un lugar del mundo compromete la solvencia de la empresa en otro continente la única solución para subsistir es innovar tecnología de cualquier tipo que procure eficiencia y compense los costes de producción, humanos e institucionales. 
¿Cuándo surge la solución creativa?: La idea original nace cuando se tratan otros problemas triviales ajenos al principal. 
Se explica porque aunque la atención se haya derivado a otro foco, el cerebro permanece procesando conexiones asociativas entre ideas y planteamientos almacenados. Esta fase recibe el nombre de «incubación». 
Cuando encuentra una solución idónea surge lo que se llama «iluminación». 
El denominado «pensamiento lateral» construido por Edward de Bono, conecta con esta forma de visualizar el problema, en tanto se emplea la perspectiva del distanciamiento del centro principal del problema a resolver. 
En este caso, distanciamiento y contemplación del problema desde ángulos asimétricos del núcleo principal generan perspectivas novedosas a las creadas en el momento de asumir el problema. 
La creatividad suele aparecer a partir de los 20 años, alcanzando su apogeo sobre los 40 años, según Dean Simonton, psicólogo en la Universidad de California. Pero estas cifras no son uniformes para todas las disciplinas: mientras que en matemáticas el punto culminante se sitúa en los 30 años, en historia y filosofía se alcanza a los 50 años. 
Sobre estos estudios hay una conclusión: hay que  y se debe innovar. Y España deberá hacer un esfuerzo para estar a la altura de los grandes innovadores que ha dado a la historia  en el ámbito literario, geográfico, naturalista,  médico, pictórico, militar,arquitectónico...a lo largo de muchos siglos.

Recordar que Carlos IV, llevó la vacuna de la viruela a todos los rincones del Imperio en lo que fue llamada «Real Expedición Filantrópica de la Vacuna  ». Tuvo una duración de tres años, desde  1803 hasta 1806, a cargo de los  drs Balmis y Salvany. 
Su propósito, vacunar a todos los españoles para evitar finales trágicos como el propio monarca padeció al perder a su hija por la enfermedad de la viruela. Su aportación a la creatividad fue hacerla extensible a todos los ciudadanos, vacunaciones masivas. En esta expedición empleo grandes sumas de la Corona.





[1]  Kraft, U. , (2005): «Creatividad», Mente y cerebro, núm. 11. 
[2]  De Bono, E. , (2008): «Seis sombreros para pensar», Madrid: Paidós. 
[3]  Mednick, S. (1964): «Aprendizaje», en Fundamentos de la serie de la psicología moderna, Englewood Cliffs, NJ, Prentice-Hall. 
[4]  Amabile, T. M. , (1983): «Social psychology of creativity: A componential conceptualization», Journal of Personality and Social Psycology, 45, 997-2013. 
[5]  Gardner, H. , (1993): «Estructuras de la mente. La teoría de las inteligencias múltiples», México: Fondo de Cultura Económico. 
[6]  Gardner, H. , (2001): «La inteligencia reformulada: las inteligencias múltiples en el siglo XXI», Madrid: Paidós. 
[7]  Kraft, U. , (2005): «Creatividad», Revista Mente y cerebro, núm. 11. 
[8]  Lubart, T. , Marmèche, E. y Bonnardel, N. , (2006): «Arte y cognición», Revista Mente y Cerebro, núm. 18, pp. 46-
[9] . 
[10]  Koontz, H. , Weihrich, H. y Cannice, M. (2012): «Administration una perspectiva global y empresarial», Perú: McGraw-Hill. 



NdR: Tambien Carlos IV, no olvidemos esto, fue el promotor del Real Canal de Albacete junto al Conde de Villaleal. Obra que evitó las epidemias que asolaban esta ciudad desde el siempre de los tiempos: cólera, tifus, dengue...porque la aguas se empantanaban en aquella por entonces Villa provocando desastres sanitarios que mermaban significativamente su población.

Con ocasion de esta pandemia de Covid19 muchos de Albacete pòdran ponderar la importancia de aquellas obras y la relevancia de sus personajes.